Además de para entretenernos, el cine y las series de televisión nos ayudan también a aprender un sinfín de cosas, entre ellas, por ejemplo, trucos y consejos de belleza. Y es que muchas de las protagonistas de dichas producciones nos han permitido saber qué no hay que hacer nunca para cuidarse o qué tratamientos son más los adecuados para cada tipo de piel o momento.
En concreto, a través de espacios y filmes como “Sexo en Nueva York”, “Friends” o “El diario de Bridget Jones”, entre otros, hemos aprendido todo esto:
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Nunca hay que ponerse un pantalón demasiado estrecho para acudir a una cita, porque en el momento que tengas que utilizar el baño puede ser que esa prenda no quiera volver a subir y quedar como estaba en un principio.
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Si tienes que hacerte un peeling o depilarte el bigote, ni se te ocurra someterte al mismo justo antes de una cita porque tu piel se pondrá enrojecida y puede ser que la persona con la que has quedado se quede mirándote pensando que tiene delante un cangrejo.
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Después de haber pasado unas horas de pasión, ni se te ocurra meterte en la ducha sin antes desmaquillarte. Y es que puede ser que tu cita quiera sorprenderte entrando en el baño y lo que encuentre es que tu cara es toda un “churrete”.
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Cuando realices una escapada, consulta el tiempo que va a hacer en tu destino para llevarte los productos necesarios para que el cabello esté perfecto. No sea que llegues allí, que no haya ningún establecimiento abierto y que, debido por ejemplo a la humedad, tu melena parezca un puro estropajo.
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Siempre que estés triste o necesites darle un giro a tu vida, córtate el cabello.